Bienvenido(a), Visitante. Por favor, ingresa o regístrate. Did you miss your activation email?

Autor Tema: crónica salida alta montaña: tour Balaitus  (Leído 2489 veces)

0 Usuarios y 1 Visitante están viendo este tema.

empujatrenes

  • Global Moderator
  • Hero Member
  • *****
  • Mensajes: 792
crónica salida alta montaña: tour Balaitus
« en: 01 de Julio de 2015, 03:37:48 pm »
Otro año más  nuestro club  realiza una actividad de varios días  por el Pirineo. En principio y según nuestro calendario de actividades ésta se iba a desarrollar el segundo fin de semana del mes de junio, pero dadas las condiciones adversas del tiempo, retrasamos la actividad para los días 26, 27 y 28 de junio, lo que significó un acierto.
    En esta edición la travesía no tenía una carga física tan dura como en otros años, por un lado el  recorrido en distancia no era muy  largo, las pernoctas bajo techo también nos favorecían el portear menos peso y la accesibilidad del agua a lo largo de todo el recorrido también nos ayudaría,  por otro lado no todo iba a ser un prado de flores y mariposas en plena montaña que sino se lo apuntan para otro año y eso no puede ser, y haciendo honor al nivel, dureza y adversidades de las “Lorenzadas”, decidí hacer algún doblete alpino, esto significa que aparte de andar la jornada de travesía cargados como mulos y con un paso espartano, como premio nos desplazábamos a alguna cima próxima donde entregar un poco de energía a los dioses de las montañas, para que ellos con la sabiduría y paciencia que poseen nos pusieran a cada uno en nuestro lugar y así yo pudiera ver y tantear el nivel de nuestros aguerridos alpinistas, todo esto sin acritud ninguna y con un gran cariño.       Como iba diciendo al haber bajado algo el nivel del esfuerzo físico, aumentamos el nivel técnico ya que en el recorrido combinaríamos técnicas de progresión en glaciar, escalada por canales en mixto, rápeles y descenso por palas de nieve de hasta 60º, para hacer una valoración previa del nivel,  empleamos una tarde en hacer prácticas de escalada en bloque y rápeles, lo que me volvería a dar algo de información sobre la soltura de los presentes, todos estos anexos no estaban incluidos en el programa por lo cual espero que me perdonen pero como todo en la vida, todo depende, y qué sería la vida sin las sorpresas que nos va dando el día a día.......

   
   Comenzamos el tour el día 26 viernes de junio, salida de  Zaragoza a las 8:00 a.m., traslados hasta el refugio de Piedrafita donde tomar un café e informarnos del estado de algunos puntos de nuestra travesía, charrada con Daniel y traslado hasta el parking de La Sarra, inicio de la travesía hasta el refugio de Respumoso, donde recuperamos fuerzas e iniciamos la ascensión al pico de Tebarray. Eran las 15 p. m. cuando comenzamos el itinerario desde el refugio de Respumoso hasta el pico de Tebarray. En principio, y según los cálculos orientativos del que suscribe, la ruta tendría una duración de más o menos alguna hora, si bien algún participante quería saber en concreto cuál sería la duración, a lo cual el que suscribe le informó de que todo depende, y el anteriormente citado preguntó: “¿de qué depende?” y la respuesta fue: “de multitud de circunstancias que dependen de otras circunstancias”, ante estas incertidumbres se planteaba una tarde interesante ya desde el comienzo. Nada más salir del refugio y cruzar el arroyo que desciende del ibón de Campoalto, tuvimos que atravesar estas corrientes de agua varias veces y ya que los puentes habían desaparecido, todos los miembros del equipo nos introducimos en las corrientes de agua descalzos y sin dudarlo. La ascensión al pico Tebarray transitó por la GR-11 que, en su primera parte se encontraba limpia de nieve, si bien a partir de la cota 2.500, los heleros hicieron acto de presencia hasta el collado de Tebarray, ya que, al parecer, todo iba sobre ruedas, en lugar de entrar a la cresta por el collado, decidimos acortar con el objetivo de ganar tiempo, cual fue nuestra sorpresa que parecía que estábamos jugando una partida de bolos, al tener que esquivar todas las piedras que nos iban cayendo por doquier, ya que se encontraba completamente resquebrajada toda la roca en este punto. Felicitar a David por la gran capacidad física de haber sobrevivido al impacto de varios meteoritos rocosos que golpearon sobre su clavícula, brazo, mano y cuerpo en general. También destacar a nuestro compañero Fran el cual tuvo que quedarse en el ibón de Llena Cantal debido a encontrarse indispuesto. Por último, el equipo holló la cima del Tebarray en un tiempo estimado de 3 horas, momento en el cual se respondió la cuestión planteada al principio de la andada. Seguidamente, retornamos al refugio por el mismo camino donde preparamos la jornada para el día siguiente y descansamos.










   Día 27, sábado: la jornada comenzó a las 7 a.m., tras el desayuno en Respumoso y caminata hasta el refugio de Ledormeur, el itinerario atravesó el embalse de Campoplano en dirección al collado de San Martín, paraje natural impresionante por su belleza y espectacularidad, la subida al collado fue tranquila, si bien en sus últimos metros nos encontramos con varios heleros y algo de tiempo para hacer un alto en el camino y recuperar fuerzas, a partir de este punto el descenso hasta el refugio Ledormeur fue progresivo y solitario ya que este valle no es muy frecuentado por los franceses. La cabaña de Ledormeur, perteneciente al C.A.F, tiene aproximadamente unas 10 plazas, totalmente acondicionado y de explotación libre, lo que significa que el primero que llega coge sitio, o sea que, como no había nadie, todo para nosotros, por la tarde aprovechamos el tiempo haciendo prácticas de rapel y algo de escalada en bloque, como es normal esto suscitó un gran interés dada la competitividad que se organizó. Por último preparación de equipos para afrontar el último día de travesía.













   Día 28, domingo: el despertador sonó a las 4:30 h y momentos después comenzamos la jornada, nos dirigimos por las primeras rampas en dirección al glaciar de Las Neous, sobre los 2.500 m encontramos ya los primeros heleros y arroyos de agua glaciar, también pudimos observar una familia de sarrios desplazándose por los aledaños contiguos, en este momento ya fue preciso equiparnos con crampones y piolets, la nieve del glaciar comenzaba a estar bastante dura y las rampas aumentando de desnivel, una vez debajo de la Cresta del Diablo continuamos todo su contrafuerte hasta la cabecera del circo donde nos aguardaba la chimenea de Las Neous, el día no podía ser mejor, cielos azules y temperatura muy agradable. Una vez atravesada la rimaya de acceso a la chimenea, pudimos observar que no sería preciso la escalada en mixto de esta chimenea ya que se encontraba limpia, en los primeros pasos tuvimos que echar la mano sobre la roca y escalar un resalte de unos 15 m, en el cual fue preciso asegurar a los componentes del grupo, no por su dificultad sino por su exposición, seguidamente continuamos el ascenso hacia la cima del Balaitus, por el espolón derecho que, en menos de unos 100 m, nos llevaría a hollar la cima. Como es típico en todas las cimas conseguidas, nos hicimos las fotos de rigor, nos abrazamos, algunos se besaron y otros comieron  y..., a continuación tuvimos la controversia de decidir el itinerario de descenso ya que barajábamos dos posibilidades, una vez analizadas las características de los descensos optamos por la opción de bajar por la brecha La Tour ya que, en dos rápeles de 60 m y un pequeño descenso en una pendiente de unos 60º, nos depositaría en el sendero que conduce hasta el refugio de Respumoso, la otra opción era bajar por la gran diagonal del Balaitus, si bien en un principio ya era transitable, dado el grupo tan amplio que éramos y el frágil estado de la roca, no era una buena opción. Contando con las maniobras de rápel y el descenso de la pendiente de la brecha La Tour, éste fue uno de los tramos técnicos más delicados de la travesía, si bien todo concluyó de forma segura y satisfactoria para todos.















   Una vez en el refugio de Respumoso, tuvimos tiempo para recuperar energías, felicitarnos por haber sobrevivido a una nueva edición de las Lorenzadas y continuamos nuestro descenso hasta La Sarra, donde cogeríamos los vehículos y retornaríamos de nuevo a la civilización.
    Bueno y eso es todo por este año en la “Lorenzada”, quedando a la espera de vuestra asistencia,  en nuevos retos y adversidades.

    Lorenzo Pueyo.......                             Alberto Morales................
    Un saludo para todos, la nube.........