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Crónica del Curso de Alpinismo Básico 2025 – Iniciación a la Alta Montaña Invernal (Nivel I)
Curso realizado los días 5 y 6 de abril en la zona de la Partacua y el Portalet.
Por fin. Después de dos intentos frustrados por la meteorología caprichosa del invierno pirenaico, el curso de Alpinismo Básico 2025 del Club Pirineos pudo celebrarse el primer fin de semana de abril. La espera y los cambios de fechas pasaron factura: de los 12 inscritos
inicialmente, solo seis pudimos cuadrar agendas y mantener el compromiso. Pero los que estuvimos, lo dimos todo.

La escasez de nieve marcó el planteamiento del curso, obligando a adaptar la planificación original a las condiciones reales del terreno.
Así, el sábado, bajo los paredones de la Partacua, centramos la jornada en terreno seco: prácticas de aseguramiento en roca, reuniones
flotantes, nudos, encordamiento glaciar… Todo bajo la atenta mirada de los monitores, Víctor y Alberto, que no dejaron pasar ni un detalle y
tuvieron la santa paciencia de aguantar nuestros errores e infinitas preguntas (algunas más productivas que otras).

Esa noche nos alojamos en el refugio Telera, en Piedrafita de Jaca, que recientemente ha cambiado de gestión. A destacar: camas con concierto de muelles y un desayuno algo escaso para un grupo con hambre de montaña.
Eso sí, la velada nos regaló una agradable sorpresa: coincidimos con Mikel Zabalza, alpinista de renombre, que dejó bien claro a la persona
del refugio que con esa alimentación “no llegaban ni a pie de vía”.

El domingo nos desplazamos al entorno del Portalet. Desde primera hora la nieve estaba transformada, así que los crampones fueron más adorno que herramienta. Dedicamos la mañana a practicar reuniones en nieve, combinando técnicas con piolet y setas de nieve, con resultados…variados. Algunas aguantaban a la primera; otras, mejor no preguntar.
Antes de comer algo al sol, tocó saltar un pequeño riachuelo disfrazado de grieta glaciar, que si bien no era especialmente profundo, sí
prometía un buen remojón en caso de traspié. Nada serio, pero lo justo para activar el pulso.

Ya por la tarde, aprovechando la roca seca, pusimos en práctica técnicas de progresión en cordada: aseguramiento en largos, seguros flotantes, encordamiento en ensamble y gestión del itinerario.
Como colofón a un fin de semana intenso, unas merecidas cervezas en Escarrilla pusieron el broche a una experiencia formativa y, sobre todo,compartida. Porque más allá de la técnica, este curso nos deja aprendizajes sobre adaptación, compañerismo y pasión por la montaña.



Texto: Pablo Laulhé
Fotos: Sección Alta Montaña, Club Montaña Pirineos
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