El fin de semana del 16 y 17 de marzo, tuvo lugar el curso de Alpinismo Invernal nivel II en el que tuve la suerte de participar junto a otros 5 compañeros

Sábado por la mañana partimos desde el parking de Ampriu remontando las pistas de esquí andando hasta la zona de prácticas. Un breve pero intenso ascenso que ya nos ayudó a entrar en calor. Una vez allí, repasamos técnicas aprendidas en el curso de Alpinismo Invernal I.

 

Nos repartimos en dos cordadas y ascendimos un resalte mediante sistema de largos, turnándonos para ir de primeros colocando seguros flotantes -ancla y estaca - y reunión con piolet en “T”; así como aseguramiento con reverso y nudo dinámico y situaciones sencillas de rápel.

 

Llegó el turno de las técnicas de seguridad y rescate. Practicamos el encordamiento glaciar y los polipastos utilizando poleas y T-block (o eraT-Rock…?😉) Materiales que algunos no conocíamos y causaron sensación por su sencillez y eficacia. Hay que hacerse con unos, pero ya…    (tibloc de petzl)

 

¡Parece mentira lo rápido que pasa el tiempo cuando estás disfrutando! Viendo que la hora se nos echaba encima, dimos un bocado rápido y descendimos de nuevo hacia el parking en busca de una zona de roca en la que practicamos la progresión, esta vez en ensamble y colocando seguros de roca – friends y fisureros en este caso - y de nuevo rappel con el añadido de aprender cómo bloquear e incluso descender al compañero en su rappel “por si tenéis que liar a alguien con menos experiencia para que os acompañe a la montaña”.

 

Con esto, damos por terminada la práctica de hoy. Pero el día no ha acabado. Todavía hay tiempo de juntarnos para comentar impresiones, conocer un poco más a los compañeros y también echar unas risas en torno a una rica cena y unas cervezas bien frías.

 

 

Con las cuerdas en doble para una distribución de fuerza más dinámica, Alberto abrió la vía y montó una solida reunión para que todos tuviésemos la oportunidad de dar unos “pioletazos” y subir la que para la mayoría de nosotros era nuestra primera cascada de hielo. Los nervios iniciales daban paso a caras de subidón y satisfacción.

 

De vuelta en bar, brindamos por el gran fin de semana disfrutado y llegó el turno de ruegos y peguntas con una mini-entrevista incluida a nuestro guía Alberto.

 

Una vez más, la actividad con el club ha superado todas mis expectativas que ya de por sí eran altas basándome en experiencias anteriores. Un fin de semana fantástico aprendiendo la gestualidad y las técnicas, así como sus porqués, ventajas e inconvenientes para poder tomar decisiones acertadas y desenvolvernos en el medio que amamos, la Montaña.

 

Encantada con el personal docente. Alberto, con una dilatada experiencia me pareció un gran conocedor de técnicas, medio y personas. Con su disposición y capacidad para enseñar y un bagaje de experiencias y aventuras impresionante que pudimos levemente vislumbrar, nos hizo sentir seguros en todo momento. Jesús, con un manejo impecable de técnicas y material mostró la misma disposición para guiarnos en el aprendizaje. Estoy deseando ver las aventuras y logros que puede llevar a cabo de seguir así.

 

Por último, no puedo dejar de dedicar unas palabras a mis compañeros. En el actual clima de violencia e incertidumbre que sacude nuestro mundo, me reconforta ver como un grupo de desconocidos en apariencia tan dispares, unidos por una afición común, podemos compartir unos momentos increíbles en armonía y respeto; gracias.

 

Paz, amor y montaña para todos!!

 

 

 

 

 

Texto: Ángela Olloqui

Fotos: Sección Alta Montaña, Club de Montaña Pirineos